El dibujo en el siglo XIX

El dibujo en el siglo XIX

El dibujo en el siglo XIX

 

Pestalozzi, Froebel y otros, en la europa germanohablante de la época, defendieron el dibujo como una forma de escritura paralela a la alfabética. El ABC de Pestalozzi inicio el interés del siglo XIX por el “dibujo pedagógico”, que se diferenciaba del dibujo que se enseñaba en la tradición académica, por el hecho de que empezaba a muy temprana edad y se canalizaba en forma de ejercicios que se asignaban simultáneamente a todo un grupo.

El método de dibujo de Pestalozzi se basaba en su creencia de que “el cuadrado era el fundamento de todas las formas, y el dibujo debería basarse en la división en partes de cuadrados y curvas”.

Mediante una serie de ejercicios sincronizados y repetitivos, el maestro ponía en práctica el dibujo de la figura, la denominaba y luego preguntaba al niño sobre su forma. Después de dibujar la forma, se pedía al niño que la localizase en su entorno. El repertorio de formas se basaba en una austera gramática de rectas, diagonales y curvas. Como señala el historiador Clive Ashwin, Pestalozzi buscaba “descomponer la complejidad de la naturaleza en sus formas constituyentes para identificar y elementizar la geometría subyacente al mundo visual, de tal modo que se hiciera asimilable para el niño”.

Otro método de dibujo basado en la idea de crear un código gráfico reductivo, un “alfabeto” del dibujo, lo publicó en 1821 Johannes Ramsauer, uno de los colegas de Pestalozzi. El Manual de dibujo de Ramsauer, parte de la idea de las Hauptformen (formas principales) que “representan la esencia abstracta de los objetos físicos”. Su tipología consiste en tres formas principales: objetos de reposo (subdivididos en erguidos y yacentes), objetos de movimiento (incluyendo las formas direccionales de las flechas, objetos giratorios como las ruedas y objetos cambiantes como una humareda), y objetos que combinan el movimiento y el reposo (incluyendo formas flotantes, como un bote en el agua, y formas colgantes, como una rama de árbol). Cada “forma principal” recibe un equivalente lineal, un signo abstracto que describe un caracter “esencial” de un objeto.

Fuente: El ABC de la Bauhaus – Ellen Lupton / J. Abbott Miller

Add a comment

*Please complete all fields correctly

Related Blogs

Ejercicio tipografico - word as image
Escala en diseño grafico